Historia de O

¿Qué será lo que pasa por la cabeza de una persona que cede su cuerpo para que hagan con él algunas prácticas realmente aberrantes? ¿Puede alguien encontrar placer real en el dolor? ¿Es adictiva la “esclavitud sexual”? Estas son algunas de las preguntas que surgirán en la mente del lector que se adentre en las páginas de “Historia de O”, uno de los libros clásicos e imprescindibles de la literatura erótica moderna.

Escrito por Pauline Réage y publicado en 1954, esta obra maestra supuso un verdadero hito dentro de este género literario. En él se narra la historia de O, una joven mujer parisina que acaba envuelta en un círculo que algunos califican de prostitución, mientras que para otros es solo una despiadada forma de perversión sexual, pero consentida en todo momento. La trama da comienzo cuando O es llevada por René, su amante, al castillo de Roissy. Allí comienzan a tener lugar una serie de rituales sadomasoquistas en los que tanto O como René tomarán parte, pero también otros personajes como Sir Stephen, hermanastro de este último, o Jacqueline, con quien O establecerá una curiosa relación. En definitiva, estamos ante una obra básica para conocer con todo lujo detalles cómo funciona el universo BDSM, para acercarnos y comprender un poco mejor los ritos a los que una persona puede llegar a someterse por puro y simple placer.

Uno de los puntos más fascinantes de esta novela es que, a pesar de relatar y describir intensas prácticas sexuales, de un alto contenido erótico, en ningún momento cae en el lenguaje vulgar y soez. Su prosa es sencilla y directa. Las descripciones son tan completas que nos trasladan al lugar de los hechos sin ningún problema. Y por si todo esto no fuera suficiente, la profundidad de los protagonistas está tan conseguida que es muy sencillo entender qué los lleva a someterse, por su propia voluntad, a tales rituales vejatorios. A medida que avanza la historia, el lector se sumergirá cada vez más en un mundo en el que parece no haber límites y en donde los deseos más oscuros pueden hacerse realidad. Podemos afirmar, por tanto, que Historia de O es mucho más que un libro erótico. Es, también, una obra en la que se plantean dilemas filosóficos y morales, que nos hace cuestionar nuestras propias ideas y que nos lleva a ver con otra mirada la concepción que tenemos sobre el sexo y el placer.